26/10/11

My Heart Is Broken






Hace unos días atrás en Sr. Marino me dijo algo que me hiso pensar mucho:

¿Todo tiene que ver contigo verdad?

En ese momento se me vino a la mente un muerto que me dijo exactamente esas mismas palabras en una situación muy parecida y esto como resultado revivió el recuerdo de mis asesinatos.

Hay un dicho muy verdadero: “quiero a quien no me quiere y a quien me quiere no quiero” (y la vocecita interior me dice: mierda) y es horrible, es como estar perdido en medio de algo que ya conoces, porque hay alguien que moriría por mí, pero yo no por él. Mirar a alguien en una dirección con un objetivo y que un tercero te mire a ti, en la misma dirección con el mismo objetivo.

Me dolió mas decirle a mi amigo “para, no sigamos con esto” que escuchar “ya no es lo mismo, lo siento, terminamos”; es que vi las caras de ambos y me dolió, como si yo mismo me autoflagelara, como si yo mismo me terminara y no es lindo. Y me pregunto ¿Por qué tú me dices eso?, ¿Qué paso por tu mente cuando decidiste decirme eso?, ¿te di alguna señal de algo entre nosotros?

Nuestro mundo es muy redondo, y me di cuenta con mis muertos, como te dañan terminan dañados, por ende cuando tu dañas… se devuelve y creo que de manera recargada + 2.
Quizás sufro de empatía en grado descontrolado, o me afecta demasiado ser quien matara una relación de amistad; porque aquí cuando un amigo dice las palabras “me gustas” las cosas cambian, no hay pie atrás y solo hay 2 respuestas posibles: “somos amigos (traducción: ándate a la mierda) y “tú también me gustas” (traducción: uuuuf). Y en mi caso doble el mensaje que capto el receptor fue el primero.
Aunque también hay una tercera respuesta… “te quiero mucho” (traducción: solo amigos pero no te alejes)

Mi corazón está roto… pero no porque alguien lo haya hecho, sino porque yo lo hice y 2 veces, esta es otra forma de decepción amorosa, ya que me transforme en las personas que me rompieron el corazón a mí, por un momento fui la persona que mis amigos odiaron por sacarme lagrimas, fui alguien que inconscientemente no quise ser, solo yo me doy el lujo de matar a dos personas en menos de 4 semanas.

Yo no quería transformarme en ese tipo de persona, use las palabras más lindas para decirle a estos 2 amigos que solo eso eran, amigos, y que jamás serian algo más. Ahora que lo pienso quizás debería haberle dado una oportunidad en su momento a ambos, de decirles ¿intentémoslo?, pero eso si hubiera sido cruel, ahí si en esa hipotética situación me hubiese transformado en un monstruo.

Es ultimo día que vi al marino supe en lo que me había convertido; ese ultimo día que el marino me dijo lo que comentaba al principio, me di cuenta que ellos no tienen el problema, quizás sea yo el problema, porque asemeje sus sentimientos como unas copas de cristal, las tome, las llene de agua, y las revente en el piso, y me di cuenta de esta situación cuando las copas estaban rotas en el piso hiriéndome las manos.

Yo pensé que solo a mi me afectaba mucho todo esto así que para tener un enfoque más claro de todo esto decidí hacer una mini encuesta, y me di cuenta de una abismal diferencia de opiniones, ya que 2 concordaron conmigo en sentir tristeza al momento de decirle a alguien “ya basta”.

Y si en verdad debí darles internamente la oportunidad de algo a mis 2 ex-amigos, así quizás no me perseguiría la culpa, y ahora estoy solo, perdido en el paraíso… mi corazón está roto.

Tengo una “suerte” increíble, ya que en 4 semanas les dije adiós a 2 personajes; cuando el 1er Sr. me dijo que yo le gustaba quede sorprendido y entre en pánico por que jamás me lo espere; cuando el 2do Sr. me dijo que yo le gustaba supe que eso no tendría un final feliz, ni terminaría en alguna parte razonable; unos amigos pensaron “que tienes suerte”, pero yo pensé que no hay nada más malo que no saber corresponder, y por eso mismo… y por esa misma maldita “no afinidad”… mi corazón esta roto.


Pd: gracias al Sr Bellamy, Sr Lorenzo Bartollini y a los demás por ayudarme en esta mini encuesta, de verdad gracias, me ayudaron a aclarar ciertos puntos y confusiones que tenia.
Pd2: me demore mucho escribiendo esto, lo siento.
Pd3: escuchen ambas canciones




18/10/11

Tierra De Osos

Una de las primeras citas que tuve en mi vida fue con un oso (oso: hombre gay grande peludo con barba) y no creo que la olvide.

Fue cuando tenía 15 años, conocí a un tipo llamado Christopher, nos juntamos en una plaza en Maipú, empezamos a conversar de manera normal y todo iba bien; hasta que lo note extraño, estaba poco a poco invadiendo mi metro cuadrado y no por su contextura grande (para no decir gorda) de oso, sino que trataba de insinuárseme de un estilo violador psicópata, hasta que de un momento a otro… se me abalanzo y yo morí de miedo, lo empuje y corrí. Ahí empezó mi terror y mi rechazo por la gente como él… y desde ese día me embarque en la tierra de osos.

Yo no sé que tengo, pero parece que mis cualidades físicas o que se yo son como la miel, miel que atrae a los osos (se me viene a la mente un oso que detesto, winnie pooh, oso de mierda!)

Hay algo bien simpático con los osos, tienen su propia banderita, sus propias fiestas y creo que también sus propias costumbres! Como un país propio, una patria osa.
Mi desesperación por evitar a los osos persistía, los veía (y los sigo viendo) por todas partes. ¿Será que la población gay se está transformando lentamente… en osos?
Lo mas “entretenido” de todo esto, es que hasta el día de hoy tengo problemas con los osos, cuando voy a alguna disco lo primero que encuentro mirándome… ¡es un oso! (pánico). Y hasta por facebook me persiguen, hubo un momento en que mis solicitudes de amistad de facebook… ¡eran solo de este tipo de personajes! ¡Tenía muchas invitaciones a sus fiestas! ¡Basta!



Para la “cultura general” los osos son un segmento relativamente pequeño dentro del mundo gay; son personajes de estatura mediana-alta y de contextura grande y ancha, la gran mayoría activos y cuando buscan pareja siempre el rol del protector es de ellos; pero ya que existen los osos, también existen los casa-osos, personajes con características totalmente opuestas a un oso que generalmente buscan sentirse “protegidos” en cierta manera.

Ya cuando paso el tiempo volví a tener un encuentro cercano con unos osos, en el “open mind fest” del año 2009, todo empezó cuando mi amigo Gabo se perdió entremedio de la gente y yo me subí a una baranda buscándolo, hasta que 2 tipos osos sin polera, llenos de pelo en la espalda y pecho, con pantalones de cuero y collares con puntas, se me acercan y me dicen “grrrrr, rico” y se  tocaban entre sí mirándome… y fue perturbador.

También está el equivalente oso en el mundo lésbico, pero a estas se les llama “camionas”; eso sí, en este caso, las camionas son mas catalogadas así por su actitud masculina que por su apariencia.

En conclusión, no me gustan los osos y no me van a gustar; creo que si sigo comiendo los mega chocolates que tanto me gustan me transformare poco a poco en uno de ellos, pero yo sería como un oso con cáncer ya que no tengo mucho pelo, y eso sí que sería horrible; si de por si creo que estoy obeso mórbido, si me transformo en oso… me interno en el baño y le doy la bienvenida a la anorexia.

No tengo mala onda con los osos, y menos algún tipo de resentimiento, pero no se que tienen… que no me gustan.






4/10/11

La Delgada Línea


“Érase una vez, hace no mucho tiempo, en un lugar no tan lejano, un chico gay de unos 17 años, con un rostro acorde a su edad y con una cantidad de amigos reducida, pero con diferencias notables con él. Estos amigos eran los típicos modelitos de gusto popular… y esto hacía que nuestro personaje tuviera serios problemas de autoestima.

En fiestas, colegio, y hasta hablando por teléfono, él encontraba que su puesto en el grupo de sus amigos era el del feíto. En sus pocas citas no le iba bien, tenía muy mala suerte ya que los “feos” lo encontraban “rico” y los “ricos” lo encontraban “feo”, lo que como resultado tenía el rechazo hacia él la mayor parte del tiempo.

En un momento él salía con un chico, y  mientras todo entre ellos iba bien… un día sin querer se lo encontró en la calle a su saliente, y éste al verlo lo fingió que no lo conocía. Nuestro personaje se dio cuenta del porqué de su acto ya que su saliente venía con un grupo de amigos… se avergonzó de él. Esta situación hizo colapsar a nuestro personaje, se hartó de todo e hizo un cambio radical, que conllevó hasta cambiarse de casa, cambió su vestimenta, su forma de hablar, sus amigos, su pelo, hasta cambió su forma de pensar tanto, que al verlo se pensaría que es otra persona.
 
Así pasaron los años, hasta que su ex grupo de amigos lo encontró en la disco que frecuentaban; se veía totalmente cambiado a como lo recordaban, pero se veía exactamente igual a ellos, fue tal su cambio que cuando sus ex amigos se acercaron para saludarlo, nuestro chico los miró despectivamente de pies a cabeza, no les respondió el saludo y se alejó.

Y así nuestro personaje se transformó; paso de ser el tímido y depresivo patito feo a transformarse en un gran cisne… en el cisne negro”

Como el personaje de este mini cuento introductorio me he sentido yo tiempo atrás, como el patito feo… y es súper extraño porque cuando pasa esta crisis de autoestima viene como un vendaval de sentimientos malditos, como la envidia, ya que al ver a otro chico “feo” con un novio extremadamente lindo me daba una rabia; también venia la pena hacia mí mismo… ya que me preguntaba “¿le gustaré a alguien… alguna vez?” o me miraba al espejo y veía a un triste y desgraciado adefesio con una ropa fea… y no me gustaba lo que el espejo proyectaba de mí mismo… y vienen nuevamente las preguntitas que invocan la auto-lástima “¿Por qué yo?”

Creo que gran parte del mundo gay se limita a lo más básico a la hora de conocer personas, ya que de manera cruel y sin ningún respeto algunos se encargan de restregarle en la cara sus “defectos” físicos al quizás futuro saliente.

Hace un tiempo atrás, el Carlos me comentaba que le había dicho a un chico con el que salía: “si bajaras de peso quizás podamos intentar algo”, pero también me decía que alguien también le había restregado en la cara sus “defectos”. O sea, lo que me dio a entender fue que a medida que destruyes a alguien con el recurso de la autoestima… te destruyen a ti. Como pecas, pagas.

¿Pero qué podemos hacer en nuestros gustos? Yo debo reconocer que a veces he sido muy superficial a la hora de conocer a alguien, pero a mí no me gusta la gente con carita de niñito, o que sean más bajos de estatura que yo, o los chicos que sean muy femeninos.
En el mundo gay hay 3 características que te “excluyen” o te “dificultan” conocer gente con intenciones más allá de la amistad:

1 – La Edad: que si es muy menos… NO! Muy pendejo. Que si es muy adulto… NO! Llevaría el logo de fundación Las Rosas. Aunque cuando era menor también viví eso, o te rechazan o te conviertes en carne fresca y vulnerable para algún sexópata.

2 – Estado Físico: que ¿si es muy flaquito? No gracias, qué asco. Que ¿si es muy gordito? No gracias, qué asco. Yo debo reconocer que tengo un complejo con este tema de la gordura, ya que cuando me levanto me miro al espejo con 4 kilos menos y la carne suelta que me habla! Es terrible!!

3 – Actitud Masculina (Piola): se le nota mucho que es gay! Es que es demasiado mujer! No gracias… podría ser heterosexual en ese caso y mejor NO!. Si es muy varonil, tan varonil que jamás se baña y quizás tiene piojos, aquí también entro a dudar ya que quizás sea un hetero curioso y tenga una doble vida.

¿Cuándo tus gustos te dicen lo superficial que eres? Nadie puede negar lo siguiente, todos tenemos nuestra propia “ficha de postulación”; en la cual hay 2 etapas, y siempre la primera parte es la vista, la segunda… aspectos psicológicos. Preocúpate si tu lista “visual” tiene más ítems que tu lista psicológica.

También me di cuenta del tipo de personas que dictaminan si es o no lindo alguien, los afeminados (ahora me buscarán para lincharme) ya que de manera escandalosa y exagerada tratan de relucir “defectos”; aparte de ellos los grandes culpables de estos problemas son los medios de comunicación, ya que al ser tan masivos estos mismos determinan lo lindo de lo feo, lo bueno de lo malo y lo correcto de lo incorrecto.

Claro que hay gente que no nos gusta… ¿Por qué salir con ellos?; no creo que para no ser superficial hay que salir con lo primero que nos diga “oye eres lindo”… nunca tan Padre Hurtado.

Así que, principalmente para no tener este tipo de problemas de fealdad, creo que hay que alejarse de gente básica que sólo ve cualidades pre fabricadas programadas en los demás… y apagar la tv.

Y para cerrar, debo decir que las situaciones que he vivido me han demostrado algo muy cierto, las personas que pueden ser feas para el resto, para mí son demasiado hermosas como para dejarme llevar por las opiniones de terceros; las personas que son lindas para la gran parte del gusto popular, o son estúpidas o tienen serios problemas mentales… y también hay veces, sólo muy pocas, en las que un chico lindo, es demasiado hermoso de los ojos hacia adentro…