25/7/14

Estado 0



¿Les ha pasado que a veces simplemente se cansan de todo y no quieren nada? Me refiero a aspectos de exigencia social; una pareja, una estabilidad “amantica” (de amante, ojo) sí? A mí también. Y justo en estos momentos cuando me encuentro con la determinación encendida y Placebo (otra vez) sonando. Una canción no tan favorable al momento.

Típico, todo pasa por un cumulo de cosas, pero en este caso, no es un cumulo; lo que me pasó es que descubrí la pirámide de la decadencia, que quizás mía o de personas en mi entorno, terminaron por aburrirme, no quiero pertenecer a una pirámide, tampoco a un ambiente.

Y es que ahora en estos momentos me aburrí; me aburrí de las fantasías de “amores eternos”, me aburrí de las aventuras esporádicas, me aburrí de conocer gente que conoce a gente que me conoce, me aburrí de simplemente el ambiente gay. No he trabajado lo suficiente en mi como pensaba, pasé 3 meses y 10 días sin publicar nada por el simple hecho de pensar que nada de lo que escribía era bueno. Y eso me hizo pensar mi querido lector Francisco, cuando justo hoy antes de ir a una entrevista de trabajo me comentaba que el ambiente gay quizás no es mi ambiente. No la paso mal en una fiesta de orden gay, pero últimamente me dan las 2 de la mañana y miro lo mismo de siempre a mi alrededor: personas que buscan un amor nocturno para cubrir la necesidad del amor eterno de princesas. Y quizás eso me aburre. El entorno. Y siendo sincero, algunas princesas.

Aunque con la compañía perfecta de fiestas y de la vida se pasa muy bien, a veces miro la decadencia en la que voy, y me siento tan igual y tan distinto a la vez a aquel tipo que afirmaba ser la Cristi, que había encontrado a Alvarito en la fiesta de año nuevo de Club Miel. Es que en ese mismo entorno, él estaba en esa fiesta para beber relativamente gratis y besar al último tipo/primer tipo del año. Me encontré con gente que no quería, y quizás eso es otro de los indicadores que todo me aburrió. El “hola” fingido; O algún otro tipo de contacto con otros o con otros. Me di cuenta que yo no quiero eso, que gracias a eso últimamente relacionado con el Instituto, el Trabajo y los amigos/familia.  Me he descuidado a mí mismo tratando de mejorar el aire de los demás.

La relación más larga que he tenido (antes que la que tengo con mi directora de arte) es conmigo mismo, y veo que es una relación tan descuidada que muchas veces no he querido seguir con eso, pero eso transforma mi ambiente propio en algo totalmente toxico.

Y para estar bien con el resto de personajes, debo prestar atención también a mis propias necesidades. Hay cualidades mías que se han perdido gracias al descuido de mí mismo. (sí, la redundancia)

Quizás me aburrí de tratar de agradarle al resto para recibir aceptación, cosa que antes no hacía. Quizás me aburrí de buscar en extraños algo que siempre ha estado en mí.

Llevo una relación conmigo mismo durante 22 años, la cual planeo retomar luego de este estado 0: 0 ganas de ver a cualquiera que me influya con sus malas energías, incluyendo a veces a personajes frecuentes. 0 ganas de relacionarme afectivamente con alguien por necesidad estipulada según la pirámide de Maslow. 

Y cito a la maestra Simone de Beauvoir: “Soy demasiado inteligente, demasiado exigente y demasiado ingeniosa como para que alguien pueda encargarse de mi completamente. Nadie me conoce o me ama totalmente, sólo me tengo a mi misma.”

Si no entendieron: ¿qué es el estado 0?

Lo que queda después del descuido de nosotros mismos.


Como lo dije anteriormente: Tengo una relación conmigo mismo hace 22 años, creo que es hora de retomarla, porque me he extrañado tanto que tengo la necesidad de buscarme, a partir de ahora. 

No puedo evitar pensar en el cambio como etapa evolutiva, que de ser así ¿por qué nos cuesta tanto volver al nosotros mismos de antes? ¿Será que la “madurez” no es precisamente la respuesta a todo lo que nos cuestionamos si no que son aún más preguntas y aún más difíciles?

15/4/14

No Hay Patente

Aquel día sábado corría con la misma normalidad que un sábado en mi trabajo, (trabajo en una cafetería que tiene una sirena descuartizada como logo). Muchos paltones, rubias de pelo, zorrones y algunas especies que sólo se encuentran en el “barrio alto”. Hasta que uno de mis supervisores me dice: “Daniel, te vas a la tienda del Mall Parque Arauco”. Ese viaje sería algo distinto. Ya que en ese viaje sufriría de acoso sexual.

Me pasaron $ para pagar el taxi de ida y vuelta desde mi tienda hasta la tienda en la cual debía prestar apoyo.

Llegue a la intersección de Alonso de Córdoba con Vitacura, y apareció un taxi, el cual al yo detenerlo, se estacionó de tal manera que el asiento del copiloto quedaba justo donde estaba yo.  Primer error: subirme de copiloto en un taxi.

Luego en el transcurso del viaje, este taxista comienza a preguntarme sobre mí, cosa que pensé hacen todos los taxistas de manera regular. Luego me preguntó sobre mi trabajo, sobre la diferencia del café X del Y. Hasta que luego me hace la célebre pregunta: ¿por qué no me preparas un café en mi departamento?  ¿Qué? En ese momento mi carácter se apagó, ya que entré en un mutismo que desconocí viniendo de mí.

Y comenzó con las insinuaciones: ¿a qué hora sales de tu trabajo? ¿Dónde trabajas? ¿te paso a buscar? Nos tomamos algo… etc.

Apenas recobré la palabra, pude decirle “déjame en esa esquina”, la cual no había visto, no sabía si quiera si estaba cerca del Parque Arauco, y mientras me disponía a cancelar el viaje, el taxista tomo mi mano por el reverso y me dijo “jamás concretamos nada”. Apenas me toco, baje del taxi como pude y tome el dinero de mi mano y se lo aventé por la puerta abierta del copiloto hacia adentro. Luego de eso, caminé lo más rápido que pude y llegué a la dichosa tienda. Donde estaba la Sofi, y pude abrazarla para calmar un poco la mezcla de rabia, pena y miedo que me dejo ese tipo. Gracias Sofi por simplemente estar ahí. Terminó mi turno de apoyo y debía ir a mi tienda de origen, pensé en alguna manera de cómo no tomar taxis, pero no tuve mucha cabeza como para elaborar algo, así que hice parar uno y me senté en la parte trasera, evitando las palabras, esperando a que llegara lo más rápido posible a destino.

Llegué y tuve que retratar la historia, ya que era demasiado notorio que no estaba de ánimos como para inventar alguna excusa. Ese día anduve serio hasta que terminó mi turno y pude ver a la Barbi, la cual le vomité la historia, ella junto con Sofi fueron los calmantes a un llanto extraño provocado por el sentimiento de humillación y asco, asco por lo que pudo haberme pasado y asco por lo que pensé después. Lo cual quizás es mucho peor que el taxista degenerado, el cual debí anotar la puta patente.

Ahora, cada vez que me subo a un taxi, me subo en el asiento trasero y trato de ser lo más cortante posible; le pido que me deje una parada antes y evito todo tipo de contacto entre él, mi plata y yo posible.
Luego del episodio del taxista y cuando pasó algo el Shock me llene de dudas. ¿Por qué paso eso? ¿En qué grado yo tenía la culpa? Y vinieron los pensamientos más peligrosos, ya que son provocados por la razón. Quizás el taxista vio en mí una posibilidad de descarga; quizás lo había hecho antes y le había resultado; quizás él pensaba que por el simple hecho de yo ser homosexual brincaría sobre él y tendríamos sexo, como quizás ya lo había vivido él; y nuevamente las dudas:

¿Qué tan mal catalogados estamos los gays en este tipo de situaciones? ¿Él pensaba que por el hecho de estar sexualmente atraído a otro hombre, me gustan todos los especímenes con un pene? ¿Cuántas veces el acoso del taxista había terminado en un terreno baldío con respuestas positivas de sexo? ¿Si tenía familia?
Y pensando deductivamente, a este señor le ha funcionado esta “técnica”. Y no una, sino varias veces por el tono determinado con el cual me lo dijo, lo más probable es que a muchos clientes les haya salido el viaje gratis, ya que mencionó su departamento.  ¿él ve en un homosexual la opción de sexo más accesible y con más posibilidades de humillación que en un/a prostituto/a? y si es así ¿Cuántos otros degenerados hay en la calle?

Y hay cosas que tienen respuesta ética, pero no social, como lo que me persigue hasta el día de hoy: la cruz de tipo fácil que tiene que lidiar con degenerados que pensaron, como les resultó una vez un polvo rápido con un homosexual, todos somos iguales. He ahí el problema, no ser iguales, ya que desde la televisión hasta un simple viaje en taxi, se puede uno dar cuenta de que tan podrida esta la sociedad para un homosexual, pudrimiento que en este caso… originó otro homosexual. 

11/2/14

A Través De Mis Días





Con una sonrisa (no sé si fingida, ya que no me preocupo de ver si me río de manera bonita para el público) me acuerdo de unos pocos días que han marcado mi vida; son días particulares, los cuales al recordar puedo transportarme a las sensaciones físicas y psicológicas de aquel momento. Dime que sí cuando te pregunte ¿te ha pasado? No quiero omitir información, tampoco pondré nombres siúticos a quien lo merezca.

- Me senté al final del bus y estaba despejado, mire por la última ventana y me dije “jamás olvidaré esto” y han pasado muchos años, pero aún recuerdo el viento helado del terminal de Las Cabras, el blanco de la pintura del bus y sus letras verdes.

- Mi último día en Pudahuel Sur fue la despedida más frívola que he realizado. Me mudé a Puente Alto; me despedí de la Tita y del Papi, como quien dice “chao” cuando vuelve al día después. Pero yo sabía que no volvería a vivir con ellos en su casa. Les dí un beso en la cara y me fui con mi mochila. Lloré desde metro Pajaritos hasta Protectora de la Infancia, porque no quería despedirme. No quería dejarlos. 

- la Mary se fue durante una semana al sur y me dejó su casa; había planificado una reunión con amigos, a la cual llego Marco, al día siguiente llego el Gabo y tuvimos la “Noche de Chicas” que consistía en ver películas y beber mucho vodka. Al día siguiente tenía una horrible resaca, pero mi mejor amigo también la tenía. Eso me lleno de felicidad. Saber que no estaba solo.

- Tomaba el Bus para ir a mi colegio a las 5 de la mañana, hacía mucho frío y simulaba estar fumando un cigarro. El pantalón de colegio jamás me abrigó lo suficiente y sentía siempre las rodillas congeladas. Odiaba levantarme tan temprano, ya que en Santiago jamás fue así.

- Mi mamá me hizo una torta de panqueques con manjar y sentía ese sabor dulce empalagoso que a la gente le impide seguir comiendo. Pero toda esa once era tan bonita. Se me había caído mi primera “sotana” según mi Papá.

- Era la hora de tomar once y siempre con la Mary y el Davi mirábamos Dragon Ball Z, en la pelea con Mayim Boo; luego venía una teleserie relacionada con el vino en el 13, para cuando terminaba, teníamos que ir a acostarnos.

- Me alegraba escuchar a Alaniss Morrisete (Crazy) y Coldplay (Talk) antes de ir al colegio.

-  La gata se sentó al lado mío y me presentó a sus amigos, luego llego la Pelusa, luego en segundo semestre llegó la Sole.

- Estaba muy ebrio y llegué al baño de Marcos para vomitar, no podía. Llegó Davi y él vomitó, eso me dio asco y vomité con él. Fue una sensación de hermandad que jamás olvidaré.

- Caminaba mucho para llegar al Manzano, lo cual me divertía porque siempre iba con la Mary y comíamos helados estilo “danky” marca Trendy sentados en la baranda de un colegio mirando a los camiones que producían un ruido ensordecedor y remecían la tierra en su pasar por la carretera. Siempre iba con el Davi y hacíamos lo mismo.

- Fui a una fiesta en la mítica Blondie, con Marco y sus amigos, ellos se fueron y me quedé sólo con él, caminamos hasta Baquedano, nos sentamos en la baranda en frente al "Teatro de la Universidad Católica" y nos quedamos conversando hasta que amaneció un lindo día nublado.

- Después de fumar marihuana con el Benja, caminaba por el pasaje de mi casa en Pudahuel Sur y trataba de seguir una línea imaginaria, cómo no podía seguirla, me reí hasta llorar, tuve que sentarme un rato a pensar cosas feas después de 2 horas de risa ininterrumpida.

- Me di cuenta que había tocado fondo por una pena de amor en 2 circunstancias. 
1. mi mamá me abrazó llorando diciendo “cómo te puedo ayudar?” 
2. después de caminar sin rumbo por Parque Forestal, tomé el metro en Bellas Artes,  miraba las líneas férreas y todo quedo en silencio. Por un momento me abandoné a las circunstancias y pensé que quizás lo mejor sería aventarse a las líneas del metro, así quizás arrancaría de todo lo que me torturaba. No sabía que yo mismo me torturaba hasta ese momento, retrocedí 2 pasos.

- En la calle Vitacura, casi me atropella un camión y gracias a una señora que puso su mano en mi estómago me salvé. Esta situación muy parecida volvió a pasar 2 veces más, una en Rosario Norte saliendo del Parque Araucano con dirección al metro Manquehue y otra en Providencia, saliendo del Parque de las Esculturas. Nuevamente 2 personas me salvaron de la misma manera mencionada antes.

- En una marcha gay tocó Francisca Valenzuela, quedé rodeado de gente y ella cantó la canción “Afortunada”, la cual le había dedicado a Francisco; éste último llego corriendo a mi lado, apartando a toda la multitud que me rodeaba y me abrazó y tarareo conmigo la canción. Él no se la sabía. Nos quedamos abrazados hasta que ella terminó de cantar y la multitud a nuestro alrededor dijo “owww” y algunos aplaudieron.  Luego de eso discutimos. 

- La Cami en un momento me abrazó afuera del edificio A de Aiep, estaba tan triste pero ella con sólo ese abrazo, logró tranquilizarme. Le agradecí al Vodka por la existencia de ella.

- Publiqué mi primera columna después de ver “Julie & Julia”, había escrito lo que publiqué ese día 3 años antes.

- Jugué con el Nico por primera vez en esas máquinas de baile, envidiósamente pensaba “porque él si puede moverse así, desgraciado,  fractúrate” y cuando ya estaba repuesto del cansancio imaginé al Nico como un hermano mayor.

- Nació Alain y yo pensaba que en cualquier momento se iba a desarmar.  Nació Alexander y yo creía que era como un perrito. 

Quiero que esas personas sepan que importantes o no, que vigentes o no, siempre estarán a través de mis días.

Dedicado a mi abuela, a mi Mami, hoy cumple 60 pero parece de 45. Gracias señora por ser tan carismática y darnos un poco de eso a toda su prole de enfermos mentales que la aman. ¿Qué haría yo si se me va?

27/1/14

Amor Enfermo



“Cuando el amor propio se olvida por amor a otros, no estas amando, estas idealizando, eso es lo que extraño de ti: mi idealización.”

Esa frase me acompaño durante mucho tiempo desde que la escuche en una película muy indie y shuper loca que daban en el TVN los días sábado en la madrugada mientras las veía con mi mami (abuela), nuestros vasos con Coca-Cola y su atención.

"Te esta matando, no es así?"
Hace un tiempo atrás me enferme de amor, pero ¿Quién no lo ha hecho? Recuerdo un día en el cual estaba apoyando mi mano en una pared afirmándome, vomitando por efecto del vodka que había sobrepasado sus límites en mí. Me di cuenta que todo esto era enfermo, cuando el estómago no me hacía vomitar, si no que su recuerdo de haber descubierto una serie de mentiras y de haber perdido lo que yo aposte como ganador en el hombre que me dejo. Todo estaba de mal en peor, mis amigos se preocupaban mucho por mí, mi familia también…  pero cuando pensé que todo estaba bien y superado, hubo algo que me hizo darme cuenta que no lo estaba, si no que al contrario, me encontraba mucho peor… ver a mi mami llorando por mí, asustada, sin saber cómo sacarme de la mierda, la cual me tragaba como arena movediza. Ahí supe que estaba más perdido de lo que pensaba, supe que estaba arrojando mi vida por un precipicio directo a un manicomio o a algún cuchillo para cortarme el brazo o a alguna línea de metro. Pero esa situación me hizo ver mi cara demacrada en el espejo, sacar fuerzas de no sé dónde, levantarme y poder caminar como lo hacía antes.

El amor enfermo en todas las personas causa estragos, nos damos cuenta que estamos sobrepasando los limites cuando algo terrible pasa, en mi caso ver que la gente a mi alrededor no sabía cómo ayudarme, decidí ayudarme yo solo. Estaba cansado y había llegado el momento de continuar, aunque sin nada, pero continué. Analice la situación y vi cómo se originó todo. Y lo peor de todo es que en todos los casos de todo mi entorno se repiten los factores. El perdón.

Pero ¿Cómo te das cuenta que lo que sientes es un amor enfermo?

Perdonas lo que antes parecía imperdonable, miras pero no observas, oyes pero no escuchas y lo peor, dejas de lado a tu gente… como jamás lo habías hecho. Y te das cuenta tarde.

Estas más del tiempo recomendado pegado con una sola persona, pueden pasar meses enteros en los cuales no puedes superar la idealización, que en parte la culpa es propia. Ya que uno inventa buenas cualidades, de ahí viene la desilusión.

Y es que cuando estas en un amor enfermo, olvidas la imagen que proyectas en los demás. De tanto pensar en el otro terminas olvidándote de ti mismo.
 
"me estoy poniendo peor y tú no lo sabes"
Y es una fase (o persona) que a todos en la vida nos ha tocado o nos tocará, uno jamás se olvida de esta persona. Pero tampoco la ama toda la vida, simplemente él (o ella) deja una cicatriz. Que nadie borrara jamás. Pero que este la cicatriz no significa que aún se ame a esa persona, simplemente significa que fuiste capas de amar incondicionalmente, y si lo hiciste una vez, lo más probable es que lo hagas 2 y 3 veces más.
No puedo evitar pensar en lo corrosivo de esto como algo tristemente alegre, ya que luego de este porrazo, tendemos a aprender a amar. Ya que como dicen por ahí, cuando alguien entra en nuestra vida, siempre deja algo propio para llevarse algo nuestro. En el caso de un amor enfermo, quien llega se lleva todo lo bueno, y deja todo lo malo que arrastra. Y es una misión casi imposible en superar, pero siempre se supera.



Nota:
Y cuando ya tu mar está en calma, cuando no hay nada oscuro a tu alrededor, llega una persona maravillosa a tu vida y tratas de formar una relación… aparece este personaje que  te mantuvo sin dormir durante meses, te hiso vomitar lágrimas en un baño de disco y al mirarlo sientes que el estómago se te retuerce, pero en esta oportunidad hay algo que cambia, y es que no lo miras con la idealización de antes. Y cuando eso pasa sabes que te estas recuperando de un amor enfermo.

Porque aunque sabes que pasara mucho tiempo en el cual este personaje salga al 100% de tu vida, sabes que eso hará… saldrá de tu vida. No te asustes, esto pasa, solo relájate y respira.

Nota 2: originalmente esta columna iba a ser escrita en conjunto con Diego, pero por las cosas de la vida, él se enfermó de amor. Dedicada a él.

1/1/14

Bonjour 2014



"Oh qu'elle est belle notre chance, aux milles couleurs de l'être humain"
oh que bella es nuestra suerte, en los miles de colores del ser humano.

"Vous êtes êtes mille phrases et moi je suis la plume"
ustedes son mil frases y nosotros somos el lapicero. 

Los 2 años anteriores hice listas para poder ordenar mi año. Según lo vivido este 2013 pasado, debo decir que las listas de propósitos, en mi caso, no sirvieron mucho. Ya que la memoria es caprichosa y la voluntad se me olvida en alguna parte del Parque Bicentenario.
Este año me propondré solo a una cosa. Ser más, mucho más, objetivo. Quiero tener convicción y simplemente quiero tener un poder de decisión decisivo (jajaja) pero quien me conoce entiende esto, me cuesta decidir. Este año espero que no.

Esta lista es distinta, no hay propósitos, simplemente haré una lista de lo que quiero:
  • 1.      Creatividad: a veces creo que me hace falta, a veces creo que sobra solo para hacer estupideces. Pero creo que necesito más creatividad y la quiero aún más en este 2014.
  • 2.      Música: como apoyo a lo que busco arriba, quiero música; en el 2013 he descubierto mucha música, espero seguir descubriendo más. Ya que sin música me cuesta pensar.
  • 3.      Estabilidad: (chan) sí, aunque usted no lo crea, este año quiero estabilidad, estabilidad con mi nueva agencia, estabilidad laboral (planeo trabajar), estabilidad de acción (mantener alguna rutina de algo que se me ocurra con el fin que yo estime conveniente), estabilidad amorosa (raro que yo escriba esto) y por último, quiero estabilidad emocional, eso incluye mayoritariamente a mis amigos; sí, no sirvo para decir “adiós”.
  • 4.      Paz para mis cercanos: a veces no sé cómo acudir a ellos y no saben la impotencia que me da ver como se hunden en una maza negra



Bueno, lo dije vía Facebook, lo mejor del 2013, son las personas nuevas que este trajo a mí. Al igual que la nueva perspectiva de mis personajes frecuentes que me rodean que tanto buenas o malas, las agradezco. . El 2014 recién está empezando y ya ansío sorprenderme, escribir, leer, escuchar música y llenarme de nuevas experiencias sin ninguna expectativa. Adieu 2013, Bonjour 2014