29/5/12

Now... I Leave You

er


Cuando pasaron 2 semanas desde que te fuiste me dije: ya basta, ya no mas… y yo me fui del lugar en el que estúpidamente te estuve esperando, cosa que sabia que no lo harías… pero la esperanza me hacia esperar.

Llore tanto por una persona que pensaba en frases de canciones que decían “no me quedan lágrimas” y es increíble que no sean tan metafóricas esas frases. Y era lamentable esa situación por que pensé que no podía salir y me vi tan hundido y acabado por las promesas y palabras que me sentía como si un auto me hubiese pasado por encima: no lo creía y sentía dolor.

Pero se cerró la etapa que pensé insuperable y más grande que mí. Si yo pude enamorarme de alguien, olvidar el orgullo por alguien, perder la cabeza por alguien, ser herido por alguien, extrañar a alguien y luego recuperarme y seguir ¿Por qué otros no pueden?

Y es que hace unas semanas atrás me encontré nuevamente pidiendo respuestas de algo que era evidente, no me amaba, no me extrañaba… y por ende, no quería verme. Aunque en ese momento hubiese implorado por eso.

Mis preguntas eran ¿solo yo quiero volver a verte? ¿Solo yo te extraño? ¿Solo yo quiero mantener viva una conversación contigo como antes? Era lo mismo, volvíamos retóricamente al “no hablare de esto” y volviste a correr, como siempre lo haces; y me volví a caer pidiendo que tu me levantaras… pero nuevamente no lo hiciste. Y desesperadamente te llame y al escucharme cortaste la llamada, y con ese ultima patética y arrastrada acción tuve todas las respuestas que no me diste:

-          No me amabas como lo dijiste hace unos días atrás de ese incidente
-          No me extrañaste
-          Estaba haciendo el gran ridículo queriendo hablarte
-          Fui tan patético al tener esperanzas de que volverías
-          Ya había muerto todo

Esto que paso lo tomo como una de esas pocas lecciones de vida que de verdad te dejan algo, que quizás era necesario en mi, ya  que lamentablemente no aprendemos hasta tropezar 3 veces con la misma piedra; lo peor ya paso y cuando te extrañe pensare en las excusas que me diste para irte y en el sonido del teléfono después que me cortaste y así se me olvida lo mucho que estuve dispuesto y predispuesto para ti y en las cosas que hice por ti para que estuvieras… en resumidas cuentas eso hace que lo poco de presencia tuya que queda en mi se valla.

Ahora pienso que si no era contigo, fue por que no pertenecías a mi vida como creía.
Ahora borre toda la información tuya para evitar contactarte.
Ahora miro tus fotos y siento lo que quería sentir… nada.
Ahora si nos vemos en algún lugar que frecuentábamos juntos no sentiré nada mas aparte del dolor de estomago.
Ahora me encontré y me siento feliz por eso.
Ahora ya no pienso en lo que me decías porque te fuiste y lo que me digas ahora serian solo palabras.
Y en su momento hubiese sido correcto sacarte los ojos… pero ¿Cómo miraras a tu alrededor y veras que estas solo? ¿Cómo podrás llorar la cuarta parte de todo lo que yo te llore extrañándote?

Y como escribí por alguna columna pasada... cuando unos se marchan los correctos llegan.

Ya tu escena termino en mi obra, pero ahora no eres el personaje principal, por que me di cuenta que la función sigue sin ti y eso te transforma en un actor de reparto más.

¿Cuándo nos damos cuenta que le damos el poder a alguien para destruirnos?

Respuesta: cuando lo hace…

Pero cuando tomas los trozos que quedaron de ti, te logras armar y te ves en el espejo… eres tu! Y ya compuesto de todo el daño que paso puedes decir: ahora… yo te dejo.



Y como un final de comedia romántica suena “sunny side up” de anneke van giersbergen cuando estoy saliendo de un OK market en dirección a mi parque armado con un chocolate, mis cigarros, mi nueva adicción al te helado “Arizona” y mis ganas de seguir escribiendo.



13/5/12

And... You Left Me




Al final mi antiguo editor tenia razón al decirme: “le escribiste algo tierno y te apuesto que cuando terminen vas a andar dando lastima”

Hace tiempo no sentía el peso en el pecho y los recuerdos de los lugares que solíamos visitar o los escritos que hice inspirado el él me cargan aun mas.

Ahora quiero que pasen los días porque hasta cerrar los ojos hacen que él vuelva y eso aparte de cargarme el pecho me produce dolores de cabeza y garganta.
“hay que darle tiempo al tiempo”, “él no te merece”, “vas a dar vuelta la pagina”, “arriba el animo”, “despéjate”, “eres demasiado para él”, “las cosas pasan por algo” y entre tantas mas frases celebres que ahora que las escucho solo me recuerdan que él se fue y no volverá jamás.

¿Dónde estas ahora que por tu culpa me siento mal? ¿Dónde quedaron los mil años que prometimos vivir? ¿No que nunca me  ibas a dejar solo? ¿Si sabias lo mucho que te necesito porque partiste? ¿Por qué espero casa vez que suena el teléfono de mi casa que seas tú diciendo que me extrañas? ¿Por qué no puedo saberlo todo? ¿Por qué no podías decirlo todo?

Me da pena y me doy pena en esta situación por que aun me cuesta ver adelante, y aun no me convenzo al 100% que te has ido y que todo se murió.

Me siento débil y poca cosa ahora. Y las preguntas no paran en mi cabeza ¿Cómo pude arrastrarme ante ti? ¿Por qué yo pude superar problemas y seguir adelante y tú con cada mínimo error sales corriendo?

Pasaron días en los que me levantaba y solo necesitaba un café para mantenerme en pie, pero su efecto dura poco tiempo, pocas horas, y cuando ya pasa vuelves a volver. Y es que ahora estas en todas partes: las cosas que hago, las estaciones de metro, la esquina de mi instituto, Santiago centro, pubs, y mil cosas más. Me cuesta imaginar que no estas.

Fui a un pub en el que para mi sorpresa estabas ahí, y te veías tan hermoso y feliz, como si sin mi estuvieras mejor y fue doloroso ver que no me veías y pensar que hace una semana atrás estábamos juntos viendo felices una película en tu casa. Y ahora quizás te sientes bien, pero yo no.

Y pasan los días y pienso tantas estupideces: quizás no me amas, quizás no me amaste, quizás no me extrañas y que lo nuestro fue solo algo mas que termina en un recuerdo. Y a veces pienso que te alejaste por mi, por que yo hice las cosas mal, por que quizás te alejaste por que te quize muy cerca.

A veces pienso que si no es contigo no es con nadie.

A veces tengo ganas de llamarte otra vez para simplemente escucharte.

A veces tengo ganas de sacarte los ojos y cortarte los brazos.

A veces quiero odiarte y ver tus fotos y sentir solo nada.

A veces quiero correr a tu casa o a alguna parte donde te encuentres solo para verte.

A veces quiero desesperadamente un abrazo y un beso tuyo.

A veces me siento tan perdido y triste que lo único que me calma son tus mensajes.

A veces creo que esto es lo mejor que me ofrecerías y duele.

Pero tu dijiste: ¿Para que seguir tirándose al suelo?

Te dije cosas muy hirientes y tu también me las dijiste a mi y creo que aun me hieren. Me hiere haberte mostrado mi familia, mi mundo y a mi mismo como no muchos me han visto.

¿Cómo nos damos cuenta que le damos el poder a alguien para destruirnos?
Respuesta: cuando lo hace.


Ahora el metro recién acaba de parar en estación bellas artes donde nos vimos la primera vez. Y sigue doliendo.

Y si antes aprendí, que el miedo puede llevarnos a perder a alguien; hoy pienso que el miedo siempre gana... y me sigue ganando.



1/5/12

Don't Leave Me Behind



¿Cuando nos damos cuenta que le entregamos a alguien el poder para destruirnos? a veces sin querer te vuelves tan dependiente de alguien que si no lo ves junto a ti simplemente no te ves mas allá de algo normal.
Y es que nadie sabe cuando parar una rueda de acción por acción, por que cuando el miedo nos ciega perdemos lo más valioso que nos queda... nosotros mismos. Pero un sentimiento totalmente igual y opuesto a la vez, es el orgullo.
Desde ahora en adelante sin orgullo y lleno de miedo puedo decir que las cosas son nuevas para mi desde este momento.

¿En qué momento mi miedo supera el sentimiento de orgullo? ¿En qué momento el orgullo supera el sentimiento? ¿Y en qué momento el sentimiento supera al miedo? ¿Cuándo el miedo supera al orgullo?
Por miedo se niegan sentimientos que por orgullo terminamos perdiendo. ¿Cuando el orgullo es desplazado por un sentimiento? ¿Cuando un sentimiento se va por miedo? ¿Cuando el miedo derrota al orgullo? Y volvemos a retoricas anteriores.

Hice hace unos días atrás algo que derriba toda mi lógica impuesta e irrompible por años inventada por mí. Aparte todo miedo y todo pensamiento cerebral para seguir mi corazón (si!! Tengo!). Y en ese trayecto pase por muchas transformaciones dignas de película trágica de romance de los años 90. Me senté en el bus de costumbre para verlo quizás por última vez, torturándome con una respuesta que aun no sabia y dispuesto a perder, aunque ya no tenía que. Él ya se había marchado y otra vez me quedaba solo.
El bus se detuvo cerca de un colegio y me baje. Sentí exactamente el mismo miedo que sentía cada vez que estaba inseguro al momento de recibir una evaluación.

Prendí un cigarro que se me hiso corto. Encendí otro. Y cuando estaba en el tercero quemándome la falange llegue al lugar más temido por mí en ese momento… su casa. Lo vi con su cara de sorpresa a mí en ese entonces ex y al llegar lo vi, y me sentí otra vez como en el rincón de un parque con él hablando de estupideces sexuales, temas muy cultos o simplemente ninguneando nuestras carreras, y otra vez teniéndolo en frente extrañaba su estúpida manera que a la vez es tan coherente y fría de ver las cosas pero algo cambiaba… no volvería eso jamás. Y por eso me encontraba allí, para recuperarlo.

Expuse mis argumentos con seguridad y esperanzas de ganador… pero todo salió como de cierta manera esperaba, había muerto todo y ya no podía hacer nada. Me marche ignorando su abrazo de despedida y pensando lo imbécil que fui al exponerme en cierta manera a alguien que no me amaba. Pensé yo, yo, yo, y yo… pero jamás en él.

Camine unos metros destruido por lo que había pasado en ese lugar, pensando cosas horribles de él y en el interminable ¿Por qué?

Pero algo me tomo de los brazos y me obligó a parar, ya murió y no quería que todo lo que habíamos vivido se fuera de un repente. Olvide el orgullo y pensé en lo que paso entre nosotros y no tenia por que terminar mal. Volví a ese lugar y él seguía despierto por qué no se demoro nada en abrir la puerta, entre y lo abrase pensando que sería la última vez que nos veríamos… y dolía mucho. Hasta que el orgullo se marcho junto con el miedo y le volví a preguntar ¿en serio no quieres intentarlo de nuevo?

Con ciertos reglamentos volvimos a ser lo que éramos antes, dos simples mortales que disfrutaban tardes acariciando a otro hombre, a otro hombre que amaban aparte de ellos mismos. Y se volvió a escribir una historia que se pensaba perdida un jueves en la tarde.



Con este acontecimiento aprendí 3 cosas:

-Se puede tener tanto miedo como para perder a alguien.

-Se pueden equivocar las reglas que tenemos para cuidarnos de salir lastimados por otra persona.

-Se puede ser tan valiente como para olvidar el orgullo.

No me dejes atrás.



Don't Leave Me Behind - We Are The Fallen (traducción)

Tú no te irás lejos,
Estos recuerdos dolorosos todavía bailan a mi alrededor,
Derramar sobre todo con la belleza,
Veo tu cara en todo ante mí
Tu voz me está cazando.

Oh, yo te pertenezco ahora,
Oh, por favor, cede ante mí,
Y quédate para siempre,
No me dejes atrás.

Tan asustado de soñar,
La historia se repite, gritando,
Monstruos, estoy sangrando,
Estoy perdiendo la luz de mí mismo,
Vuelve a mí, porque sólo tú puedes salvarme.

Yo pertenezco a ti ahora,
Oh, por favor, cede ante mí,
Y quédate para siempre,
No me dejes atrás.

Yo pertenezco a ti ahora,
Oh, por favor, cede ante mí,
Y quédate para siempre,
No 
me dejes atrás.